¿Son legales los acuerdos prenupciales en España? ¿Qué ocurre si no se firma un acuerdo prenupcial?
El matrimonio se puede describir como un contrato entre dos parejas. Si este contrato alguna vez se disuelve, un acuerdo prenupcial puede hacer que el proceso de separación y divorcio sea más fácil y menos doloroso. Desafortunadamente, muchas parejas evitan este tema, ya que puede ser una conversación incómoda y difícil. Irónicamente, estas parejas podrían tener conversaciones aún más inconvenientes durante el proceso de separación y divorcio.
¿Qué significa un acuerdo prenupcial?
Un acuerdo prenupcial se define como un contrato escrito entre dos personas antes de comprometerse en matrimonio. Por lo general, cubre temas tales como pagos de manutención como acuerdos y pensión alimenticia, cómo dividir las finanzas, cómo repartir la casa, quién conserva la posesión de ciertos artículos, cuánto tiempo puede vivir una pareja/hijos en la casa después del divorcio, herencia para hijos de compromisos anteriores y qué sucede si uno de los cónyuges le es infiel.
Para un acuerdo prenupcial válido y efectivo, debe haber un abogado separado para cada parte y no hay un acuerdo prenupcial oral, por lo que cada detalle debe anotarse en un formato registrable. Los abogados aseguran que el acuerdo prenupcial se ejecuta voluntariamente y que es justo, ya que cualquier asimetría puede conducir a la invalidación. Además, los acuerdos matrimoniales no son oponibles en España si son perjudiciales para los hijos o perjudican gravemente a uno de los cónyuges, art. 90 CC.
¿Qué ocurre si no firma un acuerdo prenupcial?
Si no firma un acuerdo prenupcial, la distribución de bienes después del divorcio se lleva a cabo de acuerdo con la ley estatal. Según el Código Civil de España el divorcio o la separación pone fin a la sociedad de gananciales, seguida de la disolución y liquidación de los bienes gananciales, art. 1392 CC. Si se produce un desequilibrio económico en perjuicio de uno de los dos cónyuges, el desfavorecido tiene derecho a una compensación que puede consistir en una pensión alimenticia por tiempo limitado o ilimitado, o en un pago único a determinar por el juez. a falta de acuerdo prematrimonial, el art. 97 CC. En determinadas circunstancias, también se puede perder el derecho a la pensión alimenticia, art. 101 CC. Los bienes muebles que no pueden dividirse por pertenecer a sus dueños están excluidos de la división y enumerados en el art. 1346 CC. La residencia familiar, aunque excluida de la división de bienes si pertenece a uno solo de los cónyuges, puede ser adjudicada por el tribunal al otro cónyuge si éste depende del uso continuado de la residencia familiar para satisfacer sus necesidades de vida o si el hijo tiene una necesidad fundamental de uso continuado de ella, el art. 96 CC. Las deudas de la comunidad se satisfacen con el dinero o los bienes de la comunidad, art. 1399-1400 CC.
En resumen, se puede decir que un acuerdo prenupcial responde de los cambios que no puede prever o anticipar, ya que es mejor tener un paraguas cuando comienza a llover. Elimina la emoción del proceso, ya que durante el divorcio es posible que ambas partes no siempre se hablen, facilita conversaciones importantes y garantiza que sus finanzas se manejen de la manera que desea, durante y después del matrimonio. La ausencia de un acuerdo prenupcial puede poner a las personas en posiciones financieramente inmanejables, mientras que firmar un acuerdo prenupcial establece la situación financiera exacta de ambas partes después de la separación. Un acuerdo prenupcial no significa que no confíe en su pareja. Significa que está invertido en el éxito a largo plazo.
Escrito en colaboración con Natalie Efiamarho